Letras Pasando Por el Quirófano. 2004

El juego
(Alfredo Armella)

el matiz siempre es el mismo
crees que te puedes destacar
pero caes en la misma estupidez
de todos los que llevan el mismo matiz
te cuelgas cosas, te pegas cosas
te dibujas cosas, te vuelves cosa.
Res en latín quiere decir cosa
No es curioso que ahora sea vaca.
Cuentas las horas cuando vas a dormir?
Cuentas las horas que te reflejas en el espejo?
Cuentas las horas entre las comidas?
Cuentas las horas entre pastillas?
Cuando te veo jugar al decadente
Ni te imaginas lo que se viene a mi mente
Ebrio te abres paso entre los demás
Mientras la cabeza se te cierra
Y te crees especial jugando
siendo publicidad de tus carencias.

Mi alma enferma de odio
(Alfredo Armella)

Extiendo mi mano
Para alcanzar tu hombro
Pero no puedo
Tu respirar me detiene.
Mi alma enferma de odio
Desea tu respiración
Tu sangre y tus lagrimas
Compararemos las llagas.
Te veo pasar frente a todos
Y extiendo mi mano vacía
Hacia la tuya pálida y fría
Que no respira decadencia.
Mi alma enferma de odio
Quiere calma, quiere morir
Para nacer con tu respiración
Sobre mi cara, sobre mis ojos.
Y tus hombros dejan de correr
Te das vuelta y ves como caigo
Infinitamente, repetidamente
Y sonríes, porque ya lo sabes.
Como te gustara respirar
El aire que asfixia mi alma
Y limpiarlo con tu imagen
Que caminaría junto a mi.
Pero el cielo se vuelve púrpura
Y yo viciado por tu imagen
Debo cerrar los ojos
Para volverte a pensar.

Modern Exorcism
(Alfredo Armella)

El cuerpo tiembla
Y es la electricidad
Que entra por la sien
La que promete calma.
Los sueros, las gotas
Los médicos, la cama
Las miradas de piedad
Entrega el pésame.
El sacerdote de blanco
Ordena y los demás obedecen
Y yo espero, tu esperas
Y el alma cambia.
Si te fueras no me daría cuenta
Estamos bajo una cuenta regresiva
Y me doy cuenta muy tarde
Y miras sin entender.
Los feligreses desfilamos
Por el quirófano
Esperando las bendiciones
Del exorcismo moderno.

El final
(Alfredo Armella)

Setenta minutos de combinaciones
De letras, palabras y acordes
Dicen mucho más que el
Maldito dolor, que el horror.
Recuerdas a brando hablando
Del horror de la guerra?
Del horror de la sinrazón?
Del cuerpo temblando?.
Estábamos alegres ese día
No había luz y tu dormías
Y yo te miraba, lentamente
Y pensé que así sería, para siempre.
Para siempre...

Bajo receta medica (parte II)
(Alfredo Armella)

Nueve de la noche aquí en Sudamérica
Los noticiarios comienzan a disertar
La comida nocturna se prepara
Y yo camino a comer un poco de vida.
Son las nueve aquí en mi casa
Y camino sin ruido a mi cama
Miro las cajas en la mesa
Adornadas por una estrella.
Esa estrella no brilla
Es la de la farmacia
La que mi alma espera
Como una religión.

La lluvia en aquel día
(Pablo Armella)

Ya era tarde para arrepentirme
las excusas solo propiciaban mi
insomnio esta vez no seré yo
quien escupa el cielo solo
aguardare con olor a encierro
hace tiempo que no tengo publico
intente hacerme bromas al mediodía
pero todo esto hace que sea vea
estúpido ya no se que hacer para
ser otro que no sea yo ten mi mano
sangrante cuando me las cortes
dios sabe lo que es mandar a su
hijo a sufrir es por eso que perdona
a mi padre por no cuidar de mi
ya es mucho para mi
los días pasan y aun no me hablas
donde estará aquel día que nos
reíamos algún día sabré que siempre
estuviste ahí pero no te atreviste a
verme así las calles mojadas por la
lluvia me advierte algo, sin duda
esa noche fue especial saber que
no me podré levantar
flores muertas en mi carruaje
serán tu ultimo recuerdo en mi
será esta tu canción para llorar
el viento en tu cara serán mis besos

Neonato
(Alfredo Armella)

Casi siempre tenemos
Que abrir los ojos a lo que viene
Pero algunas veces nos miramos
Para ver el espejo contigo.
De todas las cosas pasadas
Y de todas las que vienen
Yo sigo con el dolor
En el medio de todo
Con el dolor nacemos
Y la farmacia nos disculpa
De una que otra vida muerta
Que se hace sin saber
Quien esta preparado
Para seguir las bifurcaciones?
Quien vive con alegría
De saber la sentencia previa?
Pero no estamos solos
Tenemos a la farmacia
Que adormece el alma
Y promete calma.

El evangelio según el DSM-IV
(Alfredo Armella)

La felicidad la prometen
En cada abrir de ojos
Y en cada cerrar de ojos
Que se van con nosotros
Y algunos buscan con ganas
Riendo, soñando, muriendo
En cada risa ajena,
En cada desprecio tuyo.
Cuando escuchan palabras
No saben que las ideas no están
Y que lo que se forma
Solo es uno que se muere.
Muero cada día con ese
Dolor en el pecho
La vida cruel me mira
Y dios se ríe de nosotros.
Dios es sádico como tu
Ignorante como los padres
Idiota como todos
Promete lo que no puede cumplir.
Y yo camino cada día
Después que el espejo me dice
Que no puedo ser otro
Que no sea yo.

Hasta que la muerte nos separe
(Alfredo Armella)

Las horas de televisión
Es la música incidental
De nuestra más grande alegría
Que vivimos juntos.
Después de cada día
Que pienso en lo bien que nos odiamos
Creo que después de todo
Sin ti no puedo hacer nada.
El odio es el mejor remedio
Para nuestras vidas juntas
Porque todavía espero
Que me digas que te quedas.
Y así paso las horas
Como una resaca interminable
Esperando por la hora en que
Mis manos de tu cuello salgan.
Morir contigo sería un placer
Mejor que vivir parado ahí
En la misma esquina
Donde espero cada tarde.
Ojala dijeras que te quedas
Y no tener que ver tu cuerpo
Frió, tirado por el piso
Con la sangre, tirada por el piso.

Solsticio de invierno (parte II)
(Alfredo Armella)

Te veo pasar con audífonos
Quien mierda te crees que eres?
Escuchas alguna clase de música rara?
podría cortarte el cuello sin pensarlo dos veces.
Pero prefiero dejarte vivir
Algún idiota se sorprenderá
De lo común y corriente que eres
Con tus audífonos en tus orejas.
Que me gustaría tener en mis manos
Sangrantes y verte gritar de dolor
Y creo que sería para la risa
No poder escuchar tus propios gritos.
Así que mejor tomo otra dirección
Otra que me lleve a tu puerta
Otra que me lleve a mi cama
Otra que me cierre los ojos.

Sin Nombre
(Alfredo Armella)

A veces te puedes quebrar
Como ayer me dejó de pasar
Junté los pedazos de a poco
Los cigarros pegan las fracturas
Si me rió, sé que te conoceré
Veras mi vestido y mis llagas
Y las compararé con las tuyas
¿me encenderás el cigarro ese día?
Cuando despiertes ese día
No te arregles, has como que no me esperas
Y yo haré como que lo hago
Y cuando me levante
Te lavaré los pies.
Si no me obsesiono mañana
Es porque ya lo hice hoy
Cómo te gustará caminar conmigo
Y mirarme desde lejos
Y que la sangre diga todo lo que pueda.

Repetir cien veces la misma canción
(Alfredo Armella)

Eso es lo que hacemos
Y no queda otra opción
Repetimos como idiotas,
Pero cantamos como locos.
Es que estamos locos
Somos feos, pero tenemos
nuestras canciones alegres
de penas diarias, de nada.
Y si hacemos lo de todos
Es que no podemos ser otro
Somos los mismos, los otros
Y se que no me escucharás.
Si cada respirar es automático
Mi voluntad no existe en las tardes
Porque duele, duele respirar
Y los sueños, la puerta donde entras.
Entras a donde no te invito
Te quedas donde te fuiste
Y como quise que te quedaras
Pero estoy en extinción, volando.
No soy migratorio
Me gusta quedarme donde voy
Me escapo de donde estoy
Y llego al mismo punto:
el sueño de otro.

no te podrás caer
(Pablo Armella)

no creas que aquí podrás
dirigir el rumbo
no creas que aquí tendrás
tu lugar en el mundo
no creas que ser de acá
seas el único
no creas que todo va cambiar
si aun no sales del lado oscuro
no pienses de mas.

Nubes de primavera
(Pablo Armella)

Trato de buscar mi camino, solitario
camino, con cansancio Este
invierno no fue el aquel
que esperaba, las drogas y el sol
me quitan Las horas de
razón, ya no voy, los sueños
no se comparan con ala música
De verdad ya no estoy prefiero
estar contigo en la atardecer
Donde podremos ver el cementerio
de estrellas junto a las
nubes de primavera

Para no ser un recuerdo
(Alfredo Armella)

Para no ser un re-cuerdo
Hay que ser un presente
Y no dejarse llevar por la melancolía
Que es buena por las tardes.
Hoy me dormí más triste
Que siempre y se que es
Lo que me pasa ahora
Que el teléfono no suena tan seguido.
Tengo una pena de antes
Que siempre estará conmigo
Aunque la trate de sacar
Se quedará anclada en el medio.
En el medio de todo
Esta el dolor y el alma
Sin calma, con farmacia
Que ayuda en las horas muertas.
Que haces en mis sueños?
No me acuerdo, no te invité
Y el asco por las mañanas
En la bilis con sabor a tu nombre.
Que hacías en mis horas muertas
Te metes en la cabeza
Y no quiero inventarte más
Quiero invitarte menos.

Solsticio de invierno (parte I)
(Alfredo Armella)

Hace frió en esta región del mundo
Y a nadie le importa nada
Así que mejor me acuesto temprano
Y espero el amanecer morado.
La gente cambia de apariencia
Para no tragarse algún virus
Yo tengo a la farmacia
Para que no caigas en desgracia.
No son virus los que tengo
Son moléculas que me faltan
Y la farmacia me ayuda
A tolerar esta región del mundo.
Pero puede que no haga efecto
Y salga por las tardes a buscarte
Yo sabré como dar contigo
Esa señal nunca fallará.
Te imaginaré con una corona
Te imaginaré con una piel falsa
Te imaginaré caminando
Y te seguiré esperando.
Y estarás asustada de tanto temblar
Y estarás sentada de tanto caminar
Y te veré con ternura casi pura
Y cortaré, cortaré con locura.

Resurrección
(Alfredo Armella)

Sin embargo igual se van
Las palabras, los amigos y tu
Corriendo, riendo después
Ese día no nos dimos la mano.
Ahora, cuando me dicen de ti
Yo en las noches tengo agua
Para brindar con televisión.
De todas formas no puedo
Ser otro que no sea yo
Y si bien ahora puedo sonreír
Primero tuve que morir.
La vida cruel
Te dobla como papel
Y la farmacia cuida de ti.
Pensar que lo único que compartimos
Fue un funeral y dos cigarros
El viento, gente y la muerte
Que aun no eran mías.

Ruidos matinales
(Alfredo Armella)

La sangre que gotea por la nariz
Y rebota en el agua que corre
Me dice que los pájaros que suenan
Son escuchados por mis oídos
El vapor que quema mi mano
Con la taza que quema mi boca
El reloj que quema mis oídos
Y la eternidad que empieza a las 8
Sentarse después en la silla
Que gira para que nos riamos
Papeles que saludan a mis ojos
Y la serotonina que empieza a bajar
De tedio, de espera, de todo
Que pasa y no pasa por mi
Hasta caer en mi cama
Sin ti.
Y de mirar a los cigarrillos
Consumirse como mi vida
Y de mirar el agua rosada
Como cada mañana despierto
Y el espejo que refleja esa
Rutina, ruidos matinales
Paso a acostarme donde
Quizás me llores si te cuentan
De tedio, de espera, de todo
Que pasa y no pasa por ti
Hasta caer en tu cama
Sin mi.
Si me ves
Dime buenos días.

Virusmano
(Pablo Armella)

Hoy no voy a estar
Pensando problemas
Que no voy a solucionar
Hoy solo quiero
Despertar
Salir a caminar
Pensar y trasmitir
Soy un virusmano
Alegarme de la gente
A veces paz me da
Seguro que no hay
Remedio a esta enfermedad
Solo estoy en el universo
Pensando un nuevo tratamiento
Lo que busco esta en ti

El fuego interminable
(Alfredo Armella)

El otro día te vi pasar delante de mi
Y me dio risa, realmente nadie sabe
Que lo que vieron hoy en la televisión
Se me ocurrió el otro día que te vi pasar.
El mundo es malo, es triste, es todo
Pero realmente me importó una mierda
Cuando te dije que te sentaras
Y te pregunté si querías fumar.
Temblabas, de eso me acuerdo
No sabías que hacías ahí
Y yo, lo reconozco, te asusté un poco
Para que que no te olvidaras de mi.
Pero qué sabias tu, igual te ibas a olvidar
Porque aunque atada, los cortes
Te dolieron cuando les tiré alcohol encima
Y un poco de ron para que fuese mas trágico.
Y con la chispa adecuada ardiste
En ese fuego interminable
Que no corroe la piel, sino que
La quema, al igual que tus gritos.
Por eso te dije que si querías hablar
Lo hicieras sin miedo, porque los gritos
Nadie los escuchó, solo yo, amor mío
Cuando te torturaba sin piedad.